Según las altas cifras del porcentaje de abstención, en los procesos electorales del siglo XXI, cercanas al 50% de los ciudadanos habilitados por el consejo nacional electoral, la figura del voto obligatorio puede ser una opción para incrementar la participación ciudadana y romper la zona de confort de los gobernantes en las elecciones.

Voto obligatorio ¿Deber y/o derecho ciudadano?

El abstencionismo de la jornada electoral del 29 de mayo de 2022, muestra la disyuntiva con una alta cifra de 17,5 millones de ciudadanos que no se expresaron en las urnas.

El 40 % (con respecto a los 21, 4 millones de votantes del 29 de mayo) con 8, 5 millones de votos por Gustavo Petro y el 28 % de Rodolfo Hernández con 5,9 millones votos, son respetables, pero no son mayorías frente a los 39 millones de ciudadanos habilitados para votar.

Adicional a  los restantes 12 millones de ciudadanos que no hacen parte del censo electoral, para un total de 51.049.000 colombianos.

Abstención, fenómeno nacional y mundial

El abstencionismo de los potenciales electores en muchas partes del mundo y en Colombia es sinónimo de apatía, desilusión, incredibilidad a todo lo referente a la política, más un analfabetismo electoral generado por acción y omisión del propio Estado, altos niveles de pobreza, faltas de vías, son los obstáculos que impiden cumplir el deber ciudadano de votar.

Ante la falta de alfabetismo electoral político, compromiso del Estado y de los ciudadanos colombianos en cada jornada electoral, bien valdría la pena plantear la necesidad de aprobar como ley de la Republica, la obligatoriedad del voto por un periodo no superior a los doce años (próximas tres elecciones Presidenciales, Legislativas, Departamentales, Municipales).

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Actualmente en Colombia las únicas personas que están obligadas a participar en las elecciones son los jurados de votación; en caso de incumplimiento, sin una excusa valedera, recaen sanciones administrativas como destituciones para funcionarios públicos, y económicas si son particulares, con multa de diez salarios mínimos legales vigentes ($10.000.000).

La zona de confort de candidatos y gobernantes

A nivel global tan solo 27 países contemplan el voto obligatorio, entre ellos 11 países latinoamericanos, como mecanismo de participación.

El mayor número de votos no es garantía de la elección del mejor o más competente candidato para regir los destinos de un país.

Pero si puede ser un mecanismo para evitar movimientos como el abstencionismo del voto, maniobras de fraude electoral, dificultad de acceso a los puntos de votación e incluso desincentivar las amenazas a la población para que se abstenga de votar.

En Colombia desde el año 2000 se radicó la primera iniciativa como proyecto de ley encaminada a establecer el voto obligatorio. 

¿Por qué no logra aprobación el voto obligatorio en Colombia?

Durante estos 22 años del siglo XXI se han presentado varias iniciativas al respecto que han sido archivadas en el legislativo.

Es fácil comprender que si con un porcentaje inferior al 50% del censo electoral son elegidos la mayoría de gobernantes, es deducible que el voto voluntario,  trae menor esfuerzo a los candidatos para plantear programas de gobierno.

El impacto o beneficios de estos programas no están enfocados en la mayoría de la población. Adicional la ineficiente y hasta negligente rendición de cuentas con base en las incoherentes propuestas.

El voto obligatorio podría tener injerencia para evitar – o por lo menos disminuir- la corrupción en las jornadas electorales que trae varios delitos electorales, entre los más populares y sistemáticos la compra de votos, la cual es cuantificable, porque muy presuntamente se debe tener un presupuesto proyectado y el número de votantes a contactar en cada jornada electoral.

Por esta mala práctica es que en varias regiones -¿todas?-  durante los últimos años muchas de las elecciones parecen sucesiones familiares donde heredan el poder los pertenecientes a los diversos clanes políticos.

Posibles ventajas del voto obligatorio

El voto obligatorio puede generar la participación de las mayorías, puede fomentar la enseñanza de la estructura y funcionamiento del Estado, acompañado de análisis, compromiso, conciencia, se alfabetiza a los electores para conocer y tomar la mejor decisión al elegir a la minoría que los va a gobernar.

El voto obligatorio no ataca directamente la compra de votos, ni va a extinguir del todo esta práctica, un porcentaje alto de candidatos proclives a cometer delitos electorales lo continuarán haciendo, pero no van a ser elegidos con porcentajes bajos de votos como es costumbre, la tendrán más difícil y posiblemente se depure la política y lleguen nuevas caras o tal vez no, recordar que también se puede votar en blanco, lo importante es participar,

¡¡¡Una buena opción: Evaluar el mecanismo de voto obligatorio, los pros y los contras!!!¡

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Fuentes:

- https://www.cancilleria.gov.co/consulte-su-lugar-votacion-segunda-vuelta-elecciones-presidenciales-2022

- https://www.funcionpublica.gov.co/eva/gestornormativo/norma.php?i=8620#:~:text=Art%C3%ADculo%20258.,de%20medios%20electr%C3%B3nicos%20o%20inform%C3%A1ticos

- https://www.registraduria.gov.co/

- https://www.camara.gov.co/sites/default/files/2020-09/P.L.E.409-2020C%3B234-2020S%20%28CODIGO%20ELECTORAL%29.pdf

- https://www.radionacional.co/actualidad/cifras-de-abstencion-en-colombia-elecciones-2022

- https://elordenmundial.com/en-que-paises-es-el-voto-obligatorio/

- https://www.redalyc.org/journal/3578/357851475006/html/

- https://www.rtvc.gov.co/elecciones-colombia-2019/por-que-votar-no-es-obligatorio-en-colombia

- https://www.portafolio.co/tendencias/los-clanes-politicos-que-manejan-el-pais-534953